El
pasado lunes 30 de septiembre, la Guardia Civil bajo las órdenes de la
Audiencia Nacional asaltó las sedes de Herrira, asociación legal en defensa de los derechos humanos de los presos
políticos vascos y de apoyo a sus familiares y allegados, que denuncia firmemente
las ilegalidades cometidas por el Estado español contra los presos y presas y
la opresión que ejerce sobre el pueblo de Euskal Herria. El registro concluyó
con 18 detenidos, aparte de bloquear las cuentas bancarias de la organización y
cancelar sus sitios web y varias de sus redes sociales. Cabe destacar
especialmente los sucesos de la concentración en protesta por el registro de la
sede de Herrira en Hernani (Gipuzkoa), en la que la Ertzaintza cargó de forma
salvaje contra las personas allí presentes, hiriendo entre otras a la senadora
de Amaiur Amalur Mendizabal, que recibió 8 puntos de sutura.
Dicha represión se debe,
entre otras cosas, a los esfuerzos de Herrira por denunciar la conocida
“doctrina Parot”, jurisprudencia por la
cual la reducción de penas por beneficios penitenciarios se aplica sobre cada
una de ellas individualmente y no sobre el máximo legal permitido de
permanencia en prisión que es de 30 años, lo que conlleva alargar injustamente
la condena a los presos. Esta doctrina ha sido declarada como ilegal y
contraria a los derechos básicos por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Estos sucesos tan sólo
consiguen dejar en evidencia al Gobierno español, que, en sus esfuerzos de
crear más pantallas de humo e intentar desviar la atención de los verdaderos
problemas que sufre la clase obrera, ordena y ejecuta brutales asaltos armados,
violando los derechos de las organizaciones de la izquierda abertzale, mientras
estas apuestan por las vías políticas para conseguir unos objetivos más que
legítimos.
Aprovechamos
también para informar de que este mes de octubre se celebrará en la Audiencia
Nacional dos macroprocesos simultáneos en los que serán juzgados 40 miembros y
dirigentes de Herri Batasuna, Batasuna y Euskal Herritarrok, otros 40
militantes de Segi, y los administradores de distintas herriko
tabernas, en calidad de presuntos responsables civiles.
Desde el Bloque Joven de
Valdemoro, condenamos estos hechos y mostramos todo nuestro apoyo y solidaridad
a las personas detenidas y exigimos su libertad inmediata y sin cargos, así
como todo nuestro rechazo a la opresión y los ataques del Estado español contra
la nación de Euskal Herria.
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